El Gobierno de México solicitó la suspensión de Ecuador como integrante de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en tanto no emita una disculpa pública por el asalto a su Embajada en Quito. Además, pidió la cesación mientras no reconozca las violaciones a los principios y normas fundamentales del derecho internacional, con la finalidad de garantizar la reparación del daño moral infligido al estado mexicano y sus nacionales.
De igual modo, la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, comunicó los reclamos de su país ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) tras la irrupción de la policía ecuatoriana en la sede diplomática ocurrida el viernes último. También, instó a la CIJ juzgar y declarar al país andino como responsable del daño causado y siguen causando a México.
Igualmente, solicitó que en caso de una violación de los principios de la Carta de las Naciones Unidas similar a la cometida por Ecuador, esa Corte sea el órgano adecuado judicial para determinar la responsabilidad de un Estado a fin de iniciar el proceso de expulsión en virtud del artículo 6 de dicha de dicha Carta. Asimismo, establecer el precedente de que cualquier Estado o nación que actúe como lo hizo el gobierno ecuatoriano sea expulsado de la ONU.
La demanda agrega la importancia de evitar la repetición de estos casos, por lo cual el Tribunal Internacional de Justicia podrá presentar la expulsión de quien viole el derecho internacional de manera rápida y expedita ante el Consejo de Seguridad de la ONU y evitar el veto de sus miembros.