José Arrieta | El Heraldo de México
Corea del Norte fracasó en su más reciente intento de poner un satélite de espionaje en órbita, informaron medios estatales, meses después de que un primer cohete se estrellara en el océano tras el despegue.
El líder del país comunista, Kim Jong Un, estableció como prioritario el desarrollo de satélites de inteligencia como contrapeso a la creciente actividad de Estados Unidos en la región.
“El vuelo en la primera y segunda fase del cohete era normal, pero el lanzamiento falló por un error en el sistema de ignición de emergencia en la tercera fase del vuelo”, dijo una agencia de noticias
Joseph Dempsey, investigador del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, dijo que, aunque la formulación del fallo es confusa, Pyongyang probablemente se refiera a la separación del satélite de la lanzadera.
Según medios locales, la causa del accidente no es un gran inconveniente y apuntó a un tercer intento en octubre tras estudiar el problema y tomar medidas para remediarlo.
El Estado Mayor de Corea del Sur informó que había detectado el despegue a las 03:50 horas locales y que el cohete sobrevoló el mar Amarillo. También dijo que había iniciado una operación para recuperar los restos del aparato.
El Consejo de Seguridad Nacional del país criticó a su vecino por despilfarrar sus escasos recursos en provocaciones temerarias mientras culpa a subordinados inferiores de la situación económica que lleva a su pueblo al hambre y la muerte.