En un nuevo hito en su programa espacial, China ha enviado al espacio un microorganismo terrestre para estudiar si puede sobrevivir en condiciones similares a las de Marte. El objetivo de este experimento es arrojar luz sobre la posible existencia de vida extraterrestre en nuestro vecino rojo.
El microorganismo elegido es una arquea, un tipo primitivo que se encuentra en ambientes extremos, como el fondo del mar, los arrozales o el estómago de los rumiantes. Esta arquea es resistente a la radiación cósmica, la microgravedad y las temperaturas extremas, lo que la convierte en una candidata ideal para este experimento. El microorganismo fue transportado a la estación espacial china Tiangong 7, donde se someterá a un período de exposición a estas condiciones hostiles. Los científicos analizarán su comportamiento para determinar si es capaz de sobrevivir y reproducirse en un entorno similar al de Marte.
Si el experimento es exitoso, podría suponer un importante avance en la búsqueda de vida extraterrestre. Los científicos creen que las arqueas podrían ser una de las formas de vida más antiguas y abundantes del universo, y que podrían estar presentes en otros planetas.
El lanzamiento de este experimento es un ejemplo más del creciente interés de China por la exploración espacial. El país asiático ha invertido fuertemente en su programa espacial en los últimos años, y ha conseguido éxitos como alunizar la sonda Chang’e 4 en la cara oculta de la Luna y llegar por primera vez a Marte.
El experimento podría aportar las siguientes pistas sobre la posible existencia de vida extraterrestre en Marte:
- Si la arquea es capaz de sobrevivir y reproducirse en un entorno similar al de Marte, podría demostrar que la vida primitiva de la Tierra puede existir y desarrollarse en un entorno extraterrestre.
- Si la arquea produce metano, podría ser una evidencia de que el metano encontrado en Marte también tiene un origen biológico.