Los tratamientos faciales “vampiro”, de moda y no acreditados, se realizaban en un spa sin licencia de Nuevo México y dejaron a por lo menos tres mujeres infectadas por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH). Es la primera vez que los procedimientos cosméticos se asocian a un brote de VIH, según un informe detallado de la investigación recientemente publicado en la página de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU (CDC, por sus siglas en inglés).
Ars Technica publicó sobre el brote el año pasado, cuando las autoridades sanitarias estatales anunciaron que seguían identificando casos relacionados con el spa, a pesar de que se cerró en septiembre de 2018. Pero el informe de la investigación ofrece más datos sobre este caso sin precedentes, que asoció a cinco personas infectadas por VIH con el establecimiento y animó a los investigadores a ponerse en contacto y realizar pruebas a otros casi 200 clientes del lugar. El informe aparece en el Reporte Semanal de Morbilidad y Mortalidad de los CDC.
La investigación comenzó cuando una mujer de entre 40 y 50 años dio positivo en una prueba rápida de VIH que se le practicó mientras viajaba al extranjero en el verano de 2018. Mostraba una infección aguda en fase 1. Fue un resultado tan sorprendente como probablemente angustioso. La mujer no tenía factores de riesgo claros para contraer la infección: no consumía drogas inyectables, no recibía transfusiones de sangre y su pareja sexual actual y la única reciente dio negativo. Sin embargo, declaró haberse sometido a un tratamiento facial “vampiro” en la primavera de 2018 en un centro de belleza de Albuquerque llamado VIP Spa.
El facial “vampiro” es el nombre común de un procedimiento con microagujas de plasma rico en plaquetas. En este tratamiento, se extrae sangre al paciente, se centrifuga para separar el plasma de las células sanguíneas, y aquel que es rico en plaquetas se inyecta en la cara con microagujas. Se afirma, con escasa evidencia, que rejuvenece y mejora el aspecto de la piel, y algunos famosos como Gwyneth Paltrow y Kim Kardashian lo promovieron ampliamente.