Los rayos ultravioleta (UV) son una forma de radiación no ionizante, esta radiación, que es emitida por el sol y fuentes artificiales, tales como las camas bronceadoras, y aunque ofrece algunos beneficios a las personas, como lo es la producción de vitamina D, también puede generar riesgos para la salud.
Por ello, es importante tomar medidas para protegerse dicha radiación, como son las siguientes:
- Permanecer en la sombra, sobre todo durante las horas alrededor del mediodía.
- Usar prendas que cubran los brazos y las piernas.
- Usar sombrero de ala ancha para cubrir la cara, cabeza, orejas y el cuello.
- Usar gafas de sol envolventes que bloqueen tanto los rayos UVA como los UVB.
- Usar filtro solar con factor de protección solar 15 o más alto, que proteja tanto de los rayos UVA como de los UVB.
- Evitar broncearse en interiores. Este bronceado es particularmente peligroso para los más jóvenes; las personas que comienzan a hacerlo durante la adolescencia o los primeros años de la adultez tienen mayor riesgo de presentar melanoma.
Cuidar de la salud es una responsabilidad de todos, y en caso de tener hijos menores, es importante protegerlos y enseñarles a actuar ante esta y otras situaciones que representen un riesgo para la salud. De la misma forma, también es imprescindible la ingesta de agua para tener mejor hidratación.