Con corte al 26 de diciembre se reportaron 128 casos de viruela símica en el territorio mexicano, por lo que ya son tres mil 637 contagios desde el primer registro el 28 de mayo del 2022. A través del Informe Técnico Quincenal de Vigilancia Epidemiológica de Mpox en México, se dio a conocer del descenso de casos probables y confirmados por semana durante las últimas 10 semanas, y en la 52 solo se han detectado nueve probables contagios.
Si bien los casos se encuentran distribuidos en 32 entidades federativas, los cinco puntos de la República Mexicana con más casos son los siguientes: la Ciudad de México con mil 978 contagios, le sigue Jalisco con 389, mientras que la tercera posición es para el Estado de México con 349 casos. En Quintana Roo se han identificado 174 pacientes y en Yucatán,155.
En cuanto a distribución por sexo asignado al nacer, el predominio es en hombres, con 97 por ciento; el grupo etario de 30 a 34 años es el de mayor prevalencia, ya que presenta una tasa de incidencia de 9.44 por cada 100 mil habitantes, es decir, 960 de los tres mil 637 casos confirmados.
Hasta el 26 de diciembre se identificaron 12 defunciones, de las cuales cuatro se relacionan directamente con la infección por el virus de mpox; dos no son por esta causa directa, y seis se encuentran en análisis por parte de un grupo de personas expertas en infectología y epidemiología para definir si existe asociación causal entre la defunción y la infección por virus de mpox. Se trata de 11 hombres y una mujer, quienes durante la atención médica presentaron lesiones compatibles con mpox y que, posterior al estudio de laboratorio, fueron confirmadas.
Con base en lo reportado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), al 27 de diciembre en el mundo se han reportado 83 mil 497 casos confirmados en 110 países, territorios y áreas de las seis regiones monitoreadas por el mismo organismo de salud. Además, se han registrado 72 defunciones.
Esta enfermedad dura en promedio 21 días, y se transmite por contacto directo con las secreciones de una persona enferma a través de mucosas o lesiones de la piel, gotitas respiratorias y objetos contaminados con líquidos corporales. Se puede prevenir al evitar contacto físico directo con personas enfermas o que se sospecha pudieran tener la enfermedad. El contacto sexual es una actividad que debe tomarse en cuenta, ya que se contagia por contacto muy estrecho entre dos o más personas.