Un joven “motero” resulto herido luego de perder el control de su vehículo sobre las calles de la colonia Miguel Hidalgo, quien tuvo que ser llevado por familiares a un hospital derivado a la falta de ambulancias, en tanto el afectado revelo que el accidente fue por culpa de un perro el cual se le atravesó.Los hechos ocurrieron en horas de la tarde, cuando el “jinete” transitaba a exceso de velocidad pero en preferencia sobre la calle Vicente Guerrero con dirección a su domicilio y quien viajaba en su unidad Italika tipo 200 sin embargo al estar a pocos metros de su casa, su paso fue interrumpido por un perro.Esto causo que el “motero” evite atropellar al can, pero al ir rápido perdió el control de su vehículo lo que causó que derrape varios metros hasta quedar tendido en el pavimento mientras su motocicleta avanzo hasta chocar contra la banqueta contraria.Por el fuerte ruido los vecinos se percataron de la situación, donde intentaron ayudarlo pero al escuchar sus gritos de dolor decidieron dar aviso al número de emergencias al igual que a sus familiares ya que fue reconocido como morador de la calle.Rápidamente llegaron los parientes de la víctima seguidos de agentes estatales los cuales procedieron a cerrar el tramo lo que causó una afectación en el tránsito local, esta acción fue para evitar otro accidente por culpa de curiosos.Por su parte el herido alego sentir un fuerte dolor en sus piernas que lo imposibilitaban moverse, pero los uniformados al pedir en reiteradas ocasiones el apoyo medico les fue negado ante la falta de ambulancias “libres” en ese momento.La familia harta de la situación tuvo que abordar en la parte trasera de una camioneta al afectado el cual fue trasladado hasta al hospital General de Especialidades “Dr. Javier Buenfil Osorio”, para una mejor atención médica y deliberar si tenía una fractura.El hecho no fue turnado ante ninguna instancia de seguridad ya que el “motero” no causo mayores daños, en tanto algunos vecinos señalaron que los perros que imperan en el sector no es el primer accidente que causan ya que son varios repartidores o tortilleros que “besan el pavimento” por culpa de dichos animales.