El pasado 1 de enero entró en vigor la reforma para que, a partir de este 2023, los empleados del sector formal tengan un mínimo de 12 días de descanso pagado al año, el doble de los seis a los que tenían derecho en el anterior régimen.
De esta manera, miles de trabajadores podrán disfrutar de vacaciones dignas dado que no hay revés en la ampliación de días de descanso, luego de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó el decreto para los empleados, el cual quedó plasmado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el pasado martes 27 de diciembre y tras la aprobación del Senado.
De acuerdo con los cambios aprobados a los artículos 76 y 78 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) por parte del Congreso de la Unión, las vacaciones de 12 días podrán aumentar gradualmente hasta llegar a 32 días para los trabajadores que tengan entre 31 y 35 años de antigüedad en la misma empresa.
De ese modo, los trabajadores podrán solicitar hasta 12 días de vacaciones, ya sean seguidas o en partes, según lo prefieran, por lo que dicha medida entró en vigor a partir del 1 de enero.
Sin embargo, aunque la reforma ya es de observancia general para las empresas privadas, el goce particular del nuevo régimen vacacional depende del día de aniversario laboral de cada empleado.
Lo anterior significa que, el cambio en la fórmula y en el monto de la prima vacacional a la que se tiene derecho se verán reflejados al cumplir un nuevo año de servicio este 2023, pues la reforma no es retroactiva. Además, en caso de tener días pendientes para usar, estos tampoco se modifican.
Si el trabajador no recibe las vacaciones o la empresa se niega a permitirle el disfrute de sus días puede interponer una demanda ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.
El plazo para interponer esta demanda es de 20 días naturales después de la solicitud de las vacaciones. Por esta razón es muy importante hacer la solicitud por escrito, para así dejar una constancia de la fecha en que fueron solicitadas.