Después de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, negara el espionaje denunciado hacia periodistas y personas defensoras de derechos humanos argumentando incluso que el informe titulado “Ejército Espía” carecía de sustento, la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), Artículo 19 y Social TIC, expresaron su inconformidad ante la respuesta del mandatario federal.
El director de la organización R3D, Luis Fernando García, describió que la reacción de López Obrador ante la investigación realizada de la mano con Citizen Lab de la Universidad de Toronto y en conjunto con medios de comunicación como Animal Político, Aristegui Noticias y Proceso, simplemente fue “taparse los ojos y los oídos frente a la evidencia y repetir que todo lo que no se acomode a su mundo imaginario es mentira”.
Aunado a esto, lamentaron el que las declaraciones del presidente ante el cuestionamiento de la periodista Nayeli Roldán, deje al descubierto que “pretende deslegitimar y descalificar a Ricardo Raphael, una de las tres víctimas de espionaje, quien junto a Raymundo Ramos y un periodista de Animal Político, fueron infectados con el malware Pegasus durante la presente administración”.
A través de un comunicado recalcaron que el presidente en ningún momento se da a la tarea de presentar “evidencia científica que refute la intervención de comunicaciones de dos periodistas y un defensor de derechos humanos durante su administración”.
También reclamaron el que “el presidente no refuta la evidencia documental que da cuenta de contratos que ha sostenido la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) desde 2019 con Comercializadora Antsua S. A de C.V., empresa intermediaria con representación exclusiva en México de la empresa israelí NSO Group, desarrolladora del malware Pegasus”.
“La postura del presidente sobre la investigación #EjércitoEspía resulta inexplicable cuando el trabajo de investigación de #GobiernoEspía, que reveló el espionaje contra activistas, personas defensoras de derechos humanos y periodistas en 2017 -realizado por las mismas organizaciones firmantes con apoyo del Citizen Lab- fue respaldado y considerado serio y legítimo por quienes hoy gobiernan el país”, agregaron. Concluyeron recalcando que “si el interés de este gobierno es llegar a la verdad, existen vías y mecanismos para hacerlo más allá de la palabra de una persona”.