La razón principal por la cual, la creencia de los católicos hacia la “Patrona de México” trasciende en los años, es porque la gente pone su fe en ella para que le cumpla sus peticiones, muchas veces realizando milagros en situaciones muy adversas.
Teresa de Jesús Guevara, llegó un día antes a la ciudad de Tapachula, desde el municipio de Acapetagua, con sus 3 hijos pasaron la noche en una banqueta. Muy temprano ingresaron a la iglesia para darle gracias a la virgen María por el milagro de la vida.
“La verdad mis tres hijos son un milagro, los tres fueron embarazos de alto riesgo y yo siempre le pide a la virgencita que me diera su bendición y mire, aquí estamos”.
Teresa de Jesús / Peregrina de Acapetahua.
Teresa como muchas madres lo único que pide es por la salud de sus hijos.
“Yo siempre le pido por salud de mis hijos, de lo demás yo me encargo y por eso vinimos para darle gracias a nuestra reina”
Un grupo de transportistas de la modalidad de moto-taxis provenientes de Metapa, llegaron a la Villita para acompañar a Brayan, un joven de 18 años que estuvo al borde de la muerte por una fuerte infección y otros padecimientos; sin embargo, sus plegarias fueron escuchadas por la virgen y pudo superar la enfermedad.
Brayan López / Grupo de moto-taxis “Alex”.
En todo momento, este joven acudió a la virgen para superar su problema de salud. Siempre ha sido un fiel creyente a la morenita del Tepeyec, pues desde pequeño se apegó a su regazo y superó fuertes problemas de adicciones.
Este 12 de diciembre las familias llegan a la casa de la virgen para dar gracias por todos los milagros que la guadalupana les ha cumplido, lo que fortalece la fe católica.
La religión católica revive cada 12 de diciembre la aparición de la Virgen de Guadalupe a San Juan Diego en el Cerro del Tepeyac, ahora Ciudad de México.