En sus últimos intentos para frenar la reforma judicial del premier Benjamin Netanyahu, decenas de miles de manifestantes salieron de nuevo a las calles de Israel, principalmente en Jerusalén y Tel Aviv, en momentos en que el Parlamento comenzó a debatir la polémica medida para someterla a votación.
Cientos de manifestantes rezaron en el Muro de los Lamentos, en Jerusalén, el lugar más sagrado donde los judíos pueden orar. Al portar banderas israelíes, los afectados formaron una cadena en diferentes lugares de Jerusalén, incluso frente a la Puerta de Jaffa en la Ciudad Vieja.
La reforma judicial propuesta por el gobierno de Netanyahu ha dividido a la nación y, desde su presentación en enero, ha desatado uno de los mayores movimientos de protesta en la historia de Israel. Los inconformes ven en la reforma una amenaza para la democracia.