El expresidente de los Estados Unidos Donald Trump ha sido acusado por su manejo de documentos clasificados después de dejar la Casa Blanca.
Trump, de 76 años, enfrenta 37 cargos, incluida la retención no autorizada de archivos clasificados, según la publicación de los cargos este viernes.
La residencia de Trump en Mar-a-Lago, Florida, “no era un lugar autorizado para el almacenamiento, la posesión, la muestra o la discusión de documentos clasificados”, dice el acta que detalla los cargos.
Había documentos secretos hasta en el baño y la ducha, y algunos de ellos contenían información del programa nuclear de Estados Unidos.
Es la segunda acusación que enfrenta Trump (en marzo le imputaron 34 cargos en relación con el caso de supuestos pagos secretos a la actriz porno Stormy Daniels) y la primera acusación de carácter federal que enfrenta un expresidente de EE.UU.
El líder republicano está en campaña para regresar a la Casa Blanca en 2024 y los expertos en temas legales dicen que la acusación no limitará la capacidad de Trump para postularse nuevamente para la presidencia.
“Nunca pensé que fuera posible que algo así le pudiera pasar a un expresidente de Estados Unidos”, escribió Trump este jueves en su red social Truth Social y añadió:
“Este es, de hecho, un día oscuro para Estados Unidos de América. Somos un país en grave y rápido declive, pero juntos haremos que Estados Unidos vuelva a ser grande”.
“He sido acusado, aparentemente, por el engaño de las cajas”, dijo en referencia a las cajas con documentos clasificados del gobierno que fueron halladas hace unos meses en su mansión de Mar-a-Lago.
El exmandatarío deberá comparecer el próximo martes en una corte de Miami, en Florida, según confirmó su abogado, Jim Trusty.
Trusty le dijo a la cadena CNN que el expresidente había recibido detalles de los cargos en un documento de citación, entre los que se incluyen conspiración, declaraciones falsas, obstrucción a la justicia y retención ilegal de documentos clasificados en el marco de la Ley de Espionaje, bajo la que enfrenta 31 de los 37 cargos.
Además de afirmar que es inocente, Trump dijo en un video publicado posteriormente en Truth Social que esto es un intento por detener su campaña por la Casa Blanca: “Vienen por mí porque estamos liderando las encuestas de nuevo, por mucho, contra Biden, contra los republicanos”.
“Nuestro país se está yendo al infierno y vienen tras Donald Trump… Están destrozando nuestro país”.
El fiscal especial de Nueva York, Jack Smith, ha estado analizando las evidencias desde que fue asignado al caso por el fiscal general Merrick Garland en noviembre.
Smith, un exabogado de crímenes de guerra que goza de una fama de investigador duro, también está supervisando una investigación independiente sobre los intentos de Trump para anular los resultados de las elecciones de 2020.
Trump tendrá de presentarse ante un tribunal federal de Miami el próximo 13 de junio.
El exfiscal federal Joe Moreno le dijo a la BBC que es poco probable que el público pueda ver en directo lo que sucederá cuando Trump comparezca, ya que tendrá lugar a puerta cerrada.
“Es posible que se vea la caravana de Trump llegar al juzgado federal y que se le vea salir brevemente del vehículo”, explicó Moreno.
“Pero al final, todo será detrás de cámaras y a puertas cerrada, y habrá una negociación incómoda entre el servicio secreto y otros agentes de seguridad del tribunal federal sobre cómo manejar esta situación sin precedentes y francamente vergonzosa”.
Al tener el juicio en el estado de Florida, el equipo legal de Trump no puede argumentar que el proceso y el jurado están en un terreno adverso para él, ya que Washington DC -la otra opción del fiscal- es abrumadoramente demócrata.
Florida votó mayoritariamente por Trump en las elecciones presidenciales de 2016 y 2020.
La elección de dónde se celebra un juicio podría afectar la forma en que se inclina el jurado.
El año pasado, agentes del FBI allanaron la residencia de Trump de Mar-a-Lago, en Palm Beach, Florida.
En la operación incautaron más de 11.000 documentos, incluidos alrededor de 100 marcados como clasificados. Algunos de estos fueron etiquetados como ultrasecretos.
La semana pasada, se hizo pública una grabación de audio en la que Trump reconocía haber guardado un documento clasificado después de dejar la Casa Blanca.
Es un delito que los funcionarios federales, incluido el presidente, retiren o retengan documentos clasificados en un lugar no autorizado.
Trump señaló en su publicación de este jueves que también se han encontrado documentos clasificados en dependencias privadas del presidente Joe Biden.
“Joe Biden tenía 1.850 cajas en la Universidad de Delaware, cajas adicionales en Chinatown, D.C., aún más cajas en la Universidad de Pensilvania, y documentos esparcidos por todo el suelo de su garaje donde aparca su Corvette, que está ‘asegurado’ solo por una puerta de garaje que es de papel fino, y abierta la mayor parte del tiempo”, escribió en Truth Social.