Recientemente la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) se adhirió a la lista de dependencias del Gobierno de México que han sido víctimas de hackeos y con base en la opinión del vicepresidente de la región Bajío de la Cámara Nacional de Auto transporte de Carga (Canacar), José de Jesús Muñoz Sánchez, debido a que el ciberataque derivó en una suspensión de trámites, las consecuencias que se prevén podrían desencadenar en un escenario poco favorable para los transportistas en el territorio guanajuatense, incluso admitió que el costo del ciberataque será demasiado alto.
“Es un hackeo que si nos va a costar mucho dinero, nos están reteniendo, muchas empresas tienen placas, camiones nuevos para su trámite y si nos afecta porque no hay placas, no hay licencias, los chóferes se les vencen las licencias en el paso de la frontera, no pueden transitar de aquel lado de la frontera y sí se nos complica muchísimo”, comentó Muñoz Sánchez durante una entrevista con la Organización Editorial Mexicana.
Cabe mencionar que la SICT ya publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un acuerdo en el que se establece que desde el pasado 24 de octubre al 31 de diciembre de este 2022, se daría la suspensión de trámites y plazos legales incluidos los de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), esto con el objetivo de “salvaguardar los sistemas e información ante el incidente cibernético en equipos de cómputo al servicio de la dependencia”. Por lo anterior, el vicepresidente de la región Bajío de la Canacar explicó que los próximos meses por lo general se incrementa la demanda de trabajo, por lo que las afectaciones serán notables cerca del fin de año.
“De aquí hasta diciembre van a ser muchísimos movimientos que no se van a poder hacer y sí nos afecta económicamente mucho y de por si ahorita nos estábamos nivelando con esto de los chips que en la pandemia dejaron de vender los camiones por no tener el chip y ahorita que se están queriendo cambiar equipo y no hay placas va a estar peor”, detalló el ya mencionado.
Además de la pandemia y de la carencia de chips en las armadoras, la ciberseguridad se convierte en un nuevo reto para la dependencia referida con anterioridad y es que los trámites, licencias y altas para poder laborar tendrán que esperar. El panorama para el 2023 continúa siendo desalentador y a todo esto, José de Jesús Muñoz Sánchez, añadió lo siguiente:
“Todo esto conlleva nuestros trámites, nuestras altas y lo que estaba próximo a ingresar, lo que ya se había ingresado y la postura inicial que en su momento tomó la Secretaría, definitivamente nos dejaba atados de manos y más en una temporada tan complicada como la del cierre de año, sin dejar de considerar que como industria venimos arrastrando una situación muy complicada”.