Tras una primera revisión, la mayoría de las entidades de ahorro y crédito popular obtuvieron calificaciones reprobatorias al ofrecer sus productos a socios o clientes para evitar “malas rachas”. La delegación en Chiapas de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dio a conocer los principales incumplimientos. Dentro de este proceso, que se dividió en dos etapas de evaluación, participaron nueve Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (Socaps) y seis Sociedades Financieras Populares (Sofipos), la mayoría con resultados muy deficientes en la primera evaluación. Esto “a pesar de que la normatividad no es nueva o se ha modificado, resultando obligatoria como integrantes del sistema financiero mexicano, lo que se origina en perjuicio del usuario de servicios financieros”. En el comportamiento de las cuatro Socaps de mayor importancia nacional, destacan que solo la Caja Popular Sahuayo tuvo una nota aprobatoria de 8.5, mientras que la Caja Popular San Pablo, Caja Popular Oblatos y Caja Popular San Juan Bosco tuvieron calificaciones reprobatorias; no obstante, tras una llamada de atención y segunda revisión por parte de la comisión, todas obtuvieron una calificación de 10. En lo que respecta a las Sofipos, en la primera revisión solo Financiera Súmate (7.4) y Financiera Tamazula (6.0) tuvieron notas aprobatorias. En el segundo proceso estas dos tuvieron calificaciones de 10, mientras que la Financiera Mexicana para el Desarrollo Rural y la Financiera Sustentable de México continúan con notas reprobatorias.