Lily Gladstone sabía que quería estar en un lugar especial cuando se dieran a conocer las nominaciones a los Oscar. Y ese lugar no era en casa, viéndolo por televisión, sino en Oklahoma con el pueblo originario osage, donde vivía la mujer de la vida real que interpreta en “Killers of the Flower Moon” (“Los asesinos de la luna”) de Martin Scorsese.
“Decidí que quería estar en la reserva Osage, en caso de que esta noticia llegara hoy”, dijo Gladstone en una entrevista poco después de recibir su histórica nominación como mejor actriz, convirtiéndose en la primera indígena estadounidense recibir este honor. “Quería estar lo más cerca posible de Mollie Kyle y su familia. Así que estoy aquí en Pawhuska, Oklahoma. Una vez que las cosas terminen, creo que voy a conducir hasta Fairfax y Gray Horse y rendir mis respetos allí”.
Los padres de Gladstone la llamaron por FaceTime mientras se anunciaban las nominaciones. Les pidió que no le mostraran la pantalla del televisor, sino que se enfocaran en sus propios rostros.
“‘Dale la vuelta a la cámara'”, recordó que le dijo a su madre. “‘¡Quiero ver tus reacciones y las de papá!’ Y, efectivamente, pude escuchar que comenzaron a decir mi nombre, pero luego se ahogó pues mis padres estaban vitoreando y mi perro comenzó a ladrar”.
La nominación de Gladstone no fue una sorpresa. Los elogios por la actuación de la actriz de 37 años comenzaron desde que se estrenó la película en octubre, y ganó un Globo de Oro a principios de este mes. Ha tenido tiempo y oportunidad para articular su experiencia en este histórico momento, y sigue siendo igual de apasionada.