Extrañamente existen unas cuantas supersticiones en Corea que pueden parecer algo perturbadoras para los que estamos del otro lado del charco, y una de ellas es escribir el nombre de una persona viva con tinta roja.
Hacer esto, cuenta la leyenda, significa que la persona a la que pertenece el nombre morirá pronto, o peor aún, que prácticamente le estás deseando la muerte. Claro, todo esto tiene “una explicación”, y es que en épocas pasadas los nombres de los difuntos eran escritos con tinta roja en registros, lápidas y placas para ahuyentar a los malos espíritus.
Incluso algunas personas creen que la tinta roja aleja a los demonios y protege a los muertos, pero lamentablemente en esta cultura, para la vida, funciona totalmente al revés.
Con el pasar de los años esta creencia ha perdido un poco de fuerza, sin embargo, aún sigue generando ese sentimiento es un poco tabú escribir el nombre de alguien en tinta roja.