El fabricante aeronáutico Boeing hizo una presentación en Charleston, Carolina del Sur, ante las preocupaciones en torno a la seguridad estructural de sus modelos, en medio de investigaciones por incidentes con varios modelos, especialmente el 737 MAX.
La presentación estuvo a cargo de Steve Chisholm, vicepresidente y jefe de Ingeniería Funcional, y por Lisa Fahl, vicepresidenta de Ingeniería para los Programas de Aviones.
Los directivos de Boeing informaron sobre las medidas y protocolos actuales que aseguran la calidad de los modelos 787 y 777.
Así pues resaltaron la importancia del ensamblaje dentro de la producción de aviones, que debe ser adecuada para evitar la fatiga de los materiales.
El fabricante resaltó que la fatiga estructural ha disminuido con la evolución de los procesos de ensamblaje de los aviones en los últimos años y aseguro que tras exhaustivas pruebas, no se han detectado problemas de seguridad en la gestión de espacios en el fuselaje de los modelos 787 y 777, por lo que estos pueden volar.
Eso si, la empresa recomendó inspecciones detalladas de rutina.
Posteriormente la compañía hizo una demostración de los sistemas de ensamblaje y de las prácticas de ingeniería utilizadas en la construcción de las aeronaves. Además, mostraron la fuerza y resistencia de los materiales usados en sus aeronaves.
Con información de En El Aire