Una tarea urgente por resolver que tiene la Secretaría de Movilidad y transporte de Chiapas y la autoridad de vialidad y tránsito es frenar la voracidad de grúas que brindan este servicio en Tapachula y la región Soconusco.
Es lamentable que, hasta la fecha, las empresas que brindan el servicio en la región no estén reguladas por la autoridad, ante la anarquía que prevalece en el arrastre de vehículos y los altos precios que se cobran.
“Hay que regular los servicios de grúas, si son necesarios, pero no pueden ser voraces. Es lamentable que hasta la fecha no este regulada esta actividad, ellos se apoyan en una tarifa que la SCT les autorizó hace como 6 o 7 años”.
Manuel de Jesús Márquez González / miembro del Colegio de Abogados del Soconusco. Inserto1.
El abogado, enfatizó, que en el fuero común o del estado de Chiapas no hay una regulación a esa actividad, porque, no está acompañada de la misma ley general del transporte del estado, prácticamente es inexistente el servicio.
La falta de regulación, propicia que los dueños de estos vehículos impongan cifras estratosféricas, a su antojo, por el traslado de vehículos accidentados o que requieren ser llevados al corralón, porque la autoridad no está pendiente de las cobranzas, de las tarifas que imponen.
“Si usted no tuvo la culpa no tiene por qué pagar absolutamente nada, pero muchas veces en el calor del accidente y poca información de las personas los hace presa fácil”.
Las cifras van de los 5 hasta los 50 mil pesos. En ocasiones el traslado, arrastre, acompañamiento y resguardo son exageradamente más caros que los daños ocasionados por el accidente, incluso con daños a terceros.
Sencillamente, en caso de que la persona inmiscuida en un accidente no sea la responsable, no está obligada a pagar por el servicio de la grúa.
Márquez González, enfatizó, que es necesario poner orden pues existen muchas quejas de ciudadanos que pagan fuertes sumas por el arrastre de sus vehículos, y cuando son sancionados los llevan sin autorizar el uso de la grúa.
“La ley no está actualizada y en caso concreto es la Secretaría de Movilidad y Transporte a cargo de Aquiles Espinoza, quien debe hacer una iniciativa de ley o del reglamento para frenar los excesivos cobros”
Entre 1997 y 1998 nace la ley del transporte en el estado de Chiapas, el abogado participó en su elaboración junto a otros colegas de la entidad; por ello, con tal autorización, aseguró que falta actualizar la ley una tarea pendiente para diputados y la misma autoridad del transporte.
También, hizo un llamado a la Procuraduría Federal al Consumidor (Profeco), pero resulta que no hay ninguna oficina de esta dependencia en esta ciudad, quedando la ciudadanía en el completo desamparo.