Gracias a las peticiones de los últimos días de septiembre, sobre el trámite del testamento, se podría prolongar el programa “Mes del Testamento”, todo octubre, cuya gestión la hacen las notarías ante las autoridades a fin de seguir apoyando la economía al brindar la certeza jurídica de un bien, cuando se otorgue a familiares.
El notario público 141 de Tapachula, Edgar de León Gallegos indicó que el mes de septiembre tuvo altibajos en el trámite de testamentos, pero en los últimos días 15 días, los interesados comenzaron a reflexionar que la vida no es eterna y morirse sin un testamento, es heredarles problemas a sus familiares más cercanos.
Confirmó que es casi seguro que se apruebe la ampliación del mes del testamento, durante octubre, lo que seguirá beneficiando económicamente a las familias, ya que, en tiempos normales, este instrumento legal llega a costar hasta 4 mil pesos más impuestos, pero con la promoción queda en mil 500 más impuestos, asimismo, si el interesado es de la tercera edad, con su credencial del INAPAM; el documento llega a costar solo 600 pesos más impuestos.
Detalló que, quienes tienen las posibilidades económicas no es necesario que haya el mes de promoción, porque ya tienen la conciencia de dejar todo en regla antes de que fallezcan, pero el Mes del Testamento ha servido para que personas del sector rural y comerciantes locales, aprovechen esta oportunidad.
Afirmó que, son 25 notarías que están establecidas en Tapachula y la población tiene la libertad de elegir al notario de su preferencia, por lo que reiteró la invitación a no dejar pasar esa oportunidad, pues es fundamental dejar un instrumento legal a su familia y evitar conflictos en un futuro.
Puntualizó que un proceso sucesorio intestamentario es un proceso legal, en el cual familiares o personas que crean tener derecho a heredar los bienes de un propietario de un predio con escrituras que no deja beneficiario, estos acuden a un juez para que pueda proceder a la apertura de la sucesión legítima, pero es un proceso que lleva más tiempo, cuesta más y se lleva hasta un año, dependiendo la carga de trabajo de los juzgados, por lo que es mejor hacerlo a tiempo.