“Su Santidad el papa Francisco descansó bien durante la noche. El cuadro clínico mejora progresivamente y continúan los tratamientos previstos. Esta mañana, después del desayuno, leyó algunos periódicos y volvió al trabajo”, señala el comunicado, enviado por el vocero del pontífice, Matteo Bruni.
Según fuentes del hospital, es posible que el pontífice presida la misa el próximo 2 de abril del Domingo de Ramos en el Vaticano, “salvo imprevistos”.
Con esa misa se abren las celebraciones por la Semana Santa, que se culmina con la Pascua, la fiesta más importante del cristianismo.
Fuentes religiosas sostienen que el Vaticano está organizando un programa alternativo en caso de que el papa no pueda presidir las ceremonias religiosas.
Se trata de ceremonias largas y cansadoras, como el Via Crucis al aire libre en el Coliseo de Roma del Viernes Santo.