En medio de un entorno urbano cada vez más desarrollado, la presencia de áreas verdes se ha convertido en una necesidad vital para el bienestar de los habitantes de una ciudad. Estos espacios naturales, como parques, jardines y zonas arboladas, ofrecen una serie de beneficios que promueven la salud física, mental y ambiental de la comunidad.
Andrea Villanueva, la Presidenta del Comité de Comunicación Social, lanzó una propuesta para llevar a cabo construcciones de más espacios verdes en Michoacán, así como implantación de sistemas captadores de lluvia. La diputada del Distrito 11 de Morelia, presentó opciones de reformas al Código de Desarrollo Urbano del Estado.
De acuerdo con la diputada Villanueva Cano, aproximadamente el 80% de las emisiones de dióxido de carbono que contribuyen al efecto invernadero y al calentamiento global, provienen de las áreas urbanas, según investigaciones realizadas por la Comisión Nacional del Agua y el Centro Nacional para la Prevención de Desastres. Esta preocupante situación ha llevado a la representante local a proponer reformas al Código de Desarrollo Urbano del Estado.
En relación a este tema, la diputada resaltó la importancia de conservar las áreas verdes como una medida fundamental para regular la temperatura, así como para brindar belleza estética, retener el agua de lluvia y purificar el aire. En este sentido, subrayó la necesidad de una gestión adecuada de estos espacios en las zonas urbanas. En caso de no llevar a cabo estas acciones, la producción y acumulación de contaminantes, ruido y emisiones amenazaría la calidad de vida de los habitantes, lo que hace que sea indispensable actuar en consecuencia.
Estas iniciativas tienen como objetivo mejorar la salud y el bienestar de la población, al proporcionar un espacio adecuado para la actividad física.
Mejora la calidad del aire, las áreas verdes desempeñan un papel vital en la reducción de la contaminación atmosférica. A través de la fotosíntesis, los árboles y las plantas absorben dióxido de carbono y otros contaminantes, y liberan oxígeno fresco al ambiente. Esto ayuda a purificar el aire y disminuir los niveles de polución, lo cual es especialmente importante en entornos urbanos donde la calidad del aire puede ser deficiente debido al tráfico y las industrias.
Ayuda en la conservación de la biodiversidad en los hábitats naturales para una variedad de especies de plantas y animales. La diversidad biológica contribuye a la polinización de plantas, control de plagas y mejora de la calidad del suelo, lo cual es esencial para mantener los ecosistemas saludables y sostenibles.
Regulación del clima urbano: La vegetación ayuda a reducir la temperatura a través de la sombra y la evaporación, creando microclimas más frescos en comparación con las áreas urbanas densamente construidas. Esto puede mitigar el efecto de isla de calor urbano y disminuir la necesidad de refrigeración artificial, lo cual tiene beneficios económicos y medioambientales.
Con esta propuesta, Andrea Villanueva insistió en la necesidad de fomentar la sostenibilidad en las ciudades, aprovechando al máximo los recursos naturales para reducir la contaminación, el calentamiento global y con ello, mejorar la calidad de vida de todos.