El Tren Maya cumplió un mes con una baja proporción de turistas extranjeros, con apenas dos rutas en operación, fallas y retrasos. El ferrocarril, que recorrerá 1,500 kilómetros a lo largo de la Península de Yucatán, inició operaciones el 15 de diciembre con una ruta de Campeche a Cancún. El 28 de diciembre, el servicio se suspendió por cuatro días para el inicio de la segunda ruta, de Cancún a Palenque.
En sus primeras tres semanas de operación, el Tren Maya vendió 15,579 boletos, de los cuales solo 401 fueron para turistas internacionales, según el último reporte del general Óscar David Lozano, director general de la obra.
Pese a los desafíos, los prestadores de servicios turísticos en el Caribe mexicano buscan opciones para atraer a los turistas. En un recorrido por la estación de Valladolid, en Yucatán, se observa que el flujo de pasajeros es constante y se ha convertido en una atracción para gente local y turistas curiosos.
El Tren Maya es la gran apuesta de López Obrador para impulsar el desarrollo económico del sureste mexicano. Sin embargo, la obra ha enfrentado retrasos en la construcción de los tramos aún pendientes. El mandatario ha prometido inaugurar la obra completa a finales de febrero.