Las llamadas telefónicas de extorsión en la región Soconusco han incrementado, de acuerdo a los comentarios de la población den redes sociales.
La extorsión telefónica se ha convertido uno de los delitos favoritos de la delincuencia debido a que les implica menor riesgo de ser detenidos y mayor probabilidad de obtener algún beneficio.
Los extorsionadores han cambiado el modo de operar y ahora se hacen pasar como integrantes de algún cartel, aprovechándose de la situación actual de violencia en la entidad chiapaneca para enganchar a la posible víctima, a quién con nombre y apellido se dirigen para solicitar una cuota económica a cambio de brindarle seguridad.
En ese sentido, Jorge Gutiérrez Franco, presidente del Comité de Consulta y Participación Ciudadana en el Soconusco, alertó a la población de estas llamadas, pues lo primero que se debe hacer es no engancharse y evitar contestar números desconocidos.
Señaló, que ahora los delincuentes hacen llamadas con lada local; incluso, tienen el nombre, apellido y hasta dirección de las personas; sin embargo, no se deben enganchar con la llamada, porque toda esa información que se supone es personal, los extorsionadores la pueden conseguir fácilmente, como a través de información pública en línea, la información en tu cuenta de redes sociales, o incluso a través de conocidos o amigos que pueden haber proporcionado información personal a los extorsionadores.
No seguir en la llamada, al momento de escuchar el discurso intimidatorio, inmediatamente colgar, debido a que en la mayoría de sus variantes los extorsionadores emplean violencia psicológica para engañar a sus víctimas.
Aunque, el 80% de este tipo de delitos no son denunciados; Jorge Gutiérrez, insistió a las victimas entregar el número de extorsión a las autoridades, para que sea investigado y al mismo tiempo lo enliste para conocimiento de la ciudadanía.
A su vez, recomendó, tener siempre comunicación con los familiares y llevar toda la información sobre este delito y juntos pongan en práctica medidas preventivas, por ejemplo, no contestar números desconocidos, aunque sea lada local, bloquear y distribuir ese número para que otros familiares y conocidos hagan lo mismo