Este jueves por la mañana un árbol de alrededor de 15 metros se vino abajo, lo que provocó un perjuicio para las familias que viven colindantes al río Texcuyapan en la zona sur oriente, pocas horas después, llegaron elementos de protección civil para hacer labores de corte, sin embargo, hay más árboles en condiciones de riesgo de hasta 25 metros que deben ser derramados o cortados, pidieron familias de las colonias “2 de marzo” y “Los Pinos”.
José Morales, quien vive en el andador Mazatlán de la colonia 2 de marzo, narró el momento en que el estruendo que ocasionó la caída del árbol, tomó por sorpresa a du familia que vive a escasos metros del incidente, por lo que mencionaron que se llamó a las autoridades, para cortar el árbol y evitar que se provocara una inundación por el taponamiento del afluente.
Mencionó que en cada temporada de lluvias los habitantes de esta colonia viven con el temor, y aunque reconocen que viven en una zona de peligro, aprovecharon para pedirles a las autoridades la construcción del muro de contención, y también que las autoridades evalúen las condiciones de los demás árboles.
Por su parte, doña Elena Aguilar Hernández, quien vive muy cerca de una enorme ceiba de más de 25 metros, sostuvo que es importante que las autoridades de protección civil hagan caso a las solicitudes que han hecho, en relación al riesgo que tienen varias familias, ya que la raíz de la ceiba está casi al ras de suelo, debido a que la lluvia ha socavado esa parte.
A parte de la ceiba a los pocos metros está un árbol de mango de las mismas dimensiones, que igualmente se encuentra debilitado de sus raíces, y se ha inclinado hacia las viviendas, por lo que sienten temor de las consecuencias que puedan surgir en caso de que estos árboles cedieran ante la lluvia.
Dijo que ya tienen una mala experiencia con el huracán Bárbara que tronó unas ramas de la ceiba y afectó su vivienda, sin embargo, ahora se ve que el riesgo es mayor, y más si se considera que, en las viviendas aledañas hay niños y personas de la tercera edad, que dificultarían su salida en caso de un derrumbe.